Desde
los propios inicios de la humanidad según lo que nos enseña La Biblia y todo el
cuento de la creación del mundo, que se ha trasmitido de generación en
generación a través de nuestros padres por causa de las diferentes corrientes
religiosas universales y que al hacer un minucioso enfoque calculador e
investigativo usando en muchos casos la lógica, además de agregarle también
cierto matiz teológico – liberal, es decir; aplicando un poco la teología de la
liberación encontramos siempre un factor fundamental y profundamente ligado a
la evolución del ser humano en función de crear sus propios destinos y de
lograr su emancipación para defenderse a sí mismo, defender a los suyos, a lo
que le pertenece, a lo que le duele, hasta lograr sus sueños; pero también para
ser diferente a todo lo que le rodea, quedando demostrado de esta manera que el
hombre y la mujer en su afán y su angustia de buscar respuestas a sus
interrogantes, descubrir el universo y beber de los manantiales del saber, se
ha proclamado en rebeldía para trochar los caminos de la libertad.
Ese factor, esa condición que hoy a nosotros los revolucionarios nos lleva a pasearnos a lo largo y ancho del paradigma de la rebeldía, de la libertad, no es otra cosa que el mismo factor y la misma condición que llevó a Adán a salirse del estatus de confort que tenía en el Jardín de Edén, a comer del “fruto prohibido” para salir de ese estado de ingenuidad y asumir su responsabilidad abiertamente ante el mundo y luchar por lo que aspiraba, por su familia, por su entorno; igualmente que en el caso de el primer gran revolucionario de la historia, “Cristo Redentor, Cristo Socialista” que rompió todos los esquemas para demostrar que un mundo diferente con justicia social en beneficio de las mayorías, de los oprimidos, de los pobres, si era posible. Incluso se ha planteado la hipótesis que Jesús en ese período en el cual La Biblia no relata nada sobre El y desaparece de la agenda siendo un niño para luego reaparecer ya hecho hombre, se asegura que estuvo preparándose, estudiando y evolucionando en el saber para poder enfrentar al Imperio Romano.
Ese factor, esa condición que hoy a nosotros los revolucionarios nos lleva a pasearnos a lo largo y ancho del paradigma de la rebeldía, de la libertad, no es otra cosa que el mismo factor y la misma condición que llevó a Adán a salirse del estatus de confort que tenía en el Jardín de Edén, a comer del “fruto prohibido” para salir de ese estado de ingenuidad y asumir su responsabilidad abiertamente ante el mundo y luchar por lo que aspiraba, por su familia, por su entorno; igualmente que en el caso de el primer gran revolucionario de la historia, “Cristo Redentor, Cristo Socialista” que rompió todos los esquemas para demostrar que un mundo diferente con justicia social en beneficio de las mayorías, de los oprimidos, de los pobres, si era posible. Incluso se ha planteado la hipótesis que Jesús en ese período en el cual La Biblia no relata nada sobre El y desaparece de la agenda siendo un niño para luego reaparecer ya hecho hombre, se asegura que estuvo preparándose, estudiando y evolucionando en el saber para poder enfrentar al Imperio Romano.
@jonathanajedrez lapatriarebelde@gmail.com
Esa "angustia del conocimiento" ha sido la llama que ha encendido los corazones y los espíritus de todos aquellos hombres y todas aquellas mujeres que en determinado momento de la historia han dejado su huella imborrable e inolvidable, aquí en Venezuela hemos tenido varios y varias, mas recientemente ese gigante que es, fue y seguirá siendo Hugo Chavez. A algunos nos da esa "angustia", y la verdad que es muy sabrosa (jeje) porque no hay nada que supere la satisfacción que se siente cuando esa angustia en determinado momento es saciada, pero al mismo tiempo saber que no termina ahí, sino que aun hay mas, mucho mas, jamas sera saciada por completo, pero es ahí donde radica su encanto, en esa insaciedad por el conocimiento. Excelente articulo camarada, solo una pequeña acotación, y espero no te moleste que la haga, ya la corregirás si te parece conveniente hacerlo, se escribe "a si mismo", "superarse a si mismo".
ResponderEliminarMuchisimas gracias por su aporte! Ya hice la correción a tu acotación. Saludos.
EliminarMuy buen articulo ........cada 100 anos nace un lider como fue nuestro cristo redentor,clibertador y nuestro comandante eterno es por ello que gracias a su ideologia logro cambiar nuestro pais y ahora mas que nunca tenemos patria.. los revolucionarios de corazon seguiremos su legado
ResponderEliminarOla. En su comentario Ud ensalza al revolucionario, Chavez. Yo como cristiano, no elevo a ningún ser humano, ni comparo con ningún ser humano a mi redentor Jesucristo, quien derramo su sangre preciosa, para redimirnos de nuestros pecados, y de nuestras soberbias pecaminosas. Nuestra confianza y fe debe estar solo en el Hijo de Dios, y no en el hombre. Como cristiano espero que muy pronto Dios establezca su reino en la tierra, para acabar con todos los males de la humanidad, el sufrimiento, las enfermedades, el dolor y la muerte. (Apocalipsis 22. Que el Señor los bendiga.
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